martes, 17 de abril de 2012

La neblina de papel de arroz

En la cara diminutas venas de las que se desprende la imagen de una fina y larga lombriz que se mueve, permitiendo apreciar sus órganos en movimiento. Las manos escavan y terminan por hundir por completo al cuerpo. Avanza poco a poco acariciado por las raíces menudas de las zanahorias. Se pronuncia sobre la teoría de los espejos pero nadie le oye. No le huelen, nadie le oye. Con una sonrisa imperceptible vacila sobre otro tipo de cosas.

¿¡Basta con quedarte con un acre y mirarlo bien!? - ¡Sí!... ¡Sí basta! (Mientras va retrocediendo.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario